Javier Gómez Noya, hijo de emigrantes gallegos en Suiza, donde nació, aunque a los tres meses su familia retornó a Ferrol, cursando allí sus primeros estudios; posteriormente se trasladó a Pontevedra, donde entrena y vive. Fue nombrado «Hijo predilecto» de la ciudad de Ferrol el 27 de septiembre de 2012.
Su primer deporte fue el fútbol pero a los 11 años se cansó y un compañero lo animó a practicar la natación en el Club Natación Ferrol. En ese momento conoció a su primer entrenador, José Rioseco con el que logró numerosos títulos de campeón gallego en categorías infantil, junior y absoluto en pruebas de crol (200, 400 y 1500) y estilos (200 y 400) y siendo finalista en campeonatos de España en diferentes categorías. En 1998, conoce a unos triatletas que nadaban con él y decide competir. Debutó en el triatlón olímpico de Castropol (Asturias), con 15 años, sin entrenar apenas los segmentos de bici y carrera a pie, y finalizando en segunda posición en categoría juvenil, en un triatlón que ganó Iván Raña.
En diciembre de 1999, en una concentración con la selección española juvenil en Madrid, los médicos del Consejo Superior de Deportes (CSD) le detectan una anomalía cardiaca. En junio de 2000, participó en su primera competición internacional, el Campeonato de Europa juvenil por equipos, en Hungría. Con el apoyo de especialistas en cardiología de todo el mundo intenta recuperar su licencia internacional y mientras gana los Campeonatos de España de duatlón y triatlón tanto en categoría junior como sub 23 y gracias a un error administrativo participa en el Campeonato de Europa junior de duatlón, aunque se le mantuvo la licencia retirada.
En noviembre de 2003, Noya recuperó la licencia tres semanas antes de participar en el Campeonato del Mundo sub 23. Con esas tres semanas de entrenamiento acudió a Nueva Zelanda y ganó la competición.
Leave a Comment